Comparto artículo y podcast de mi intervención de hoy en el programa "El Espejo Canario" por el reciente premio del CEIP Los Giles #simoedu SIMO EDUCACIÓN IFEMA MADRID EDUCACIÓN 3.0 Educación Gobcan
Este viernes 20 de octubre participé en La Mañana De Cope Gran Canaria con Javier Bénítez con motivo del Premio SIMO 2023 al "Mejor Proyecto cooperativo y colaborativo" de esta edición de XI Premios a la Innovación Educativa y Experiencias Docentes Innovadoras SIMO EDUCACIÓN #simoedu 2023,concedido al CEIP Los Giles por el proyecto "Desarrollo de la competencia comunicativa a través del Booktuber". Un enorme placer estar en COPE dándole difusión a nuestro proyecto que estará en IFEMA MADRID en el mes de noviembre EDUCACIÓN 3.0
Ayer miércoles 18 de octubre fui entrevistado en Radio Las Palmas por Presen Simón Rael con motivo de la experiencia «Desarrollo de la competencia comunicativa a través del Booktuber» que se desarrolla en el CEIP Los Giles dentro del Plan de Comunicación y premiada en los XI Premios a la Innovación Educativa y Experiencias Docentes Innovadoras SIMO EDUCACIÓN 2023, seleccionada y reconocida en su categoría entre las 14 Experiencias Docentes Innovadoras ganadoras de este año como el Mejor Proyecto Colaborativo y Cooperativo y que presentaré el próximo 15 de noviembre en IFEMA MADRID. #SIMOeducacion
Por Esteban G. Santana Cabrera |
¿Esta suspensión de clases se podía haber evitado? Probablemente sí, si las cosas fueran de otra manera. Y no estoy hablando en cuanto gestión de la declaración ni de la suspensión en sí, sino de las causas que originan que nuestros centros no estén preparados para pasar un episodio de calor de una manera más o menos normalizada.
Pero antes debemos saber qué un fenómeno meteorológico adverso, es aquel evento atmosférico capaz de producir, directa o indirectamente, daños a las personas o menoscabos materiales de consideración. Se definen como valores umbrales de FMA a los parámetros establecidos con criterios climatológicos a partir de los cuales se considera que existe posibilidad de que se produzcan daños severos a las personas y/o los bienes materiales.
Personalmente creo que ha habido un antes y un después a esta última suspensión de clases que ha creado muchos “memes” en redes sociales, comparando la situación climática vivida en Canarias con la que sufren muchos meses en el sur de España. Pienso que al menos ha removido conciencias entre la comunidad docente y los gestores públicos y se han dado cuenta de que los medios con los que contamos en nuestros centros educativos para pasar una ola de calor, son nulos. Aunque a esto habría que unirle la edad de los centros escolares del Archipélago, que tienen una media de 50 años, lo que hace que no solo haya cada año problemas de calor o de frío extremo, sino de otros como fallos eléctricos, roturas de baños, falta de accesibilidad, mobiliarios obsoletos, etc.
Muchos padres decían que ya era hora de que pusieran aire acondicionado en los centros, hecho este que se me antoja imposible, ya que las mayorías de los centros de Canarias tienen la potencia eléctrica a tope, y cualquier “aparato” nuevo que se ponga en marcha implica saltos de palanca continuos (y de esto tuvimos varios casos al comienzo de curso que impidieron incluso el comienzo normalizado de las clases).
La Educación y por ende la Sanidad, se han politizado legislatura tras legislatura, quitando y poniendo leyes, cambiando programaciones unas por otras, que al final son más de lo mismo, y dejando los marrones en manos del profesorado para que, con su buena intención, desarrollen los planes de emergencia, los de contención y demás, que en empresas privadas tendrían que estar realizados por técnicos con la titulación adecuada y la formación necesaria para que sean realmente efectivos, y no un corta y pega de cole en cole, adaptándolos como Dios nos encamine.
Los centros educativos se han ido convirtiendo en el cajón de sastre de esta sociedad y se ha ido olvidando de que las escuelas están para enseñar, para formar al alumnado y no para darle de comer y “educarlos”, que para eso tendría que estar la familia. Nuestros centros educativos, sobre todo de Primaria, tienen que gestionar la ayuda de material, las cuotas que deben pagar los comensales, el transporte, los incidentes que ocurren diariamente en el centro, etc, etc. Todo este tiempo quitándoselo a lo verdaderamente importante, y de lo que verdaderamente sabemos, de pedagogía. Y el profesorado cada vez más “tocado” porque nadie se ha preocupado por su salud mental, ni por su bienestar en el trabajo.
Y por otro lado, cada vez hay menos familias, desgraciadamente, que se preocupan de lo que aprende su hijo o no, sino de qué tipo de ayuda o de beca tiene derecho, si paga o no paga comedor y/o si le van a dar los libros y el material gratuito.
Creo que debemos realizar un análisis profundo de lo que está ocurriendo en la Educación y de qué podemos hacer para que nuestros centros educativos sean eso, educativos, con docentes dedicados a la enseñanza que para eso nos pagan. Lo otro, igual es el momento de ir creando figuras de otro perfil, como ha sido el de la enfermera escolar que tanto acierto tiene en los centros en los que se ha podido implementar, en el mío aún no. Qué sabremos los profesores de gestión económica, de prevención de riesgos laborales, de acoso, de programas de gestión de comedores escolares o de transporte. Pues de todo eso tenemos que hacer los maestros quitándole tiempo a lo que verdaderamente importa y encima nos comparan cada año en las pruebas PISA. Porque eso sí, cuando llega el momento de la estadística nos aprietan por todos lados para que el éxito escolar suba y el abandono baje.
Tomémonos en serio la Educación, y la Sanidad, porque son dos patas muy importantes de esta sociedad y donde caben otros profesionales más preparados para ponerle orden y cabeza, y a donde nosotros no podemos llegar.
Concluyo con unas palabras de mi amiga Carmen Terrón, directora con muchos años de experiencia: “Creo que debemos realizar un análisis profundo de lo que está ocurriendo con la educación; qué podemos hacer para que nuestros centros educativos sean lo que tienen que ser EDUCATIVOS, con docentes dedicados exclusivamente a la pedagogía y a implementar diferentes metodologías, que es para lo que nos pagan y no para abrir puertas, controlar entradas y salidas, planes covid, riesgos laborales, gestión económica, becas neae, gratuidad de libros, gestión de comedores, transporte escolar… que lo que hacen es incrementar el estrés laboral, con funciones para lo que no hemos sido preparados y para resolverlos en el tiempo en que tenemos que dedicar todo nuestro esfuerzo en mejorar la educación”.
Hoy celebramos el #DiadelDocente y recibí la llamada de RadioTelevisión Canaria - RTVC.es para hablar de mi profesión y de cómo veo la Educación hoy en día. Desde aquí mi reconocimiento a todos los docentes de Canarias por la inmensa labor que realizan. ¡Felicidades compis!
Por Esteban G. Santana Cabrera |
Según consta en el Currículo de Primaria, “la finalidad de la asignatura de Matemáticas es desarrollar las capacidades de razonamiento, abstracción, análisis, síntesis, inducción o deducción, etc., que ayudan a ordenar y estructurar la información, a encontrar semejanzas y diferencias, a argumentar con rigor y precisión al proponer retos a la inteligencia, ofreciendo oportunidades para la investigación, poniendo a prueba la imaginación y la creatividad, y planteando situaciones en las que el alumnado tenga que comunicar coherentemente las ideas y tomar decisiones de forma crítica. Además, integran aspectos como el dominio del espacio, el tiempo, la proporción, la optimización de recursos, el análisis de la incertidumbre o el manejo de la tecnología digital. Cobran especial interés elementos relacionados con el manejo de datos e información y el pensamiento computacional, que proporcionan instrumentos eficaces para entender problemas sociales, económicos, científicos, ambientales, etc., y para evaluar posibles vías de solución, tanto en entornos cercanos como más globalizados. En definitiva, se erigen como un saber instrumental indispensable en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas 2015 y la Agenda Canaria de Desarrollo Sostenible 2030”.
Leyendo esto, me estoy dando cuenta de que algo estaremos haciendo mal, y me incluyo, o no concuerda con lo que dice el Currículo. Porque las Matemáticas en muchas ocasiones se convierten en nuestras aulas en la asignatura “hueso”y que año tras año se le vuelve a nuestro alumnado más cuesta arriba, y ahí están las estadística y las pruebas PISA. Normalmente enseñamos Matemáticas tal y como nos la enseñaron a nosotros, de manera tradicional: el profesor explica, hace la demostración y el alumnado repite ejercicios de manera automática. Eso sí, en los últimos tiempos introduciendo alguna herramienta digital que lo que hace es más que poner en realce esta misma metodología de la repetición y el aprendizaje por “cansancio” y “aburrimiento”. Sin saber ni por qué aprendo ese contenido o procedimiento, ni para qué sirve y si algún día lo necesitaré para la vida diaria. Esto hace coger valor la frase de Nicolás Copérnico “Las matemáticas están escritas para matemáticos”… y no para el resto de ciudadanos del mundo.
Muchos niños de mi generación fuimos víctimas de este sistema y llegamos a “odiar” las Matemáticas y a no llegar descubrir su utilidad, porque lo único que hicieron mis maestros fue centrarse en la enseñanza del lenguaje simbólico-matemático. Pero lo más triste es que me convertí en maestro y me dediqué a “repetir” ese modelo entre mis alumnos en la Educación Primaria sin apenas poner los cimientos para construir los fundamentos del razonamiento lógico-matemático en los niños y las niñas de mi clase, incumpliendo su función formativa, no contribuyendo al desarrollo cognitivo, ni al instrumental, ni permitiendo posteriores aprendizajes tanto de Matemáticas como de otras asignaturas e imposibilitando la comprensión y resolución de problemas de la vida cotidiana.
En el artículo Educación y didáctica de las matemáticas, el profesor Guy Brousseau Profesor emérito, IUFM2 d' Aquitaine, Francia, afirma que “en los inicios del siglo XXI vamos a abordar la educación matemática con recursos que aparentemente no tienen punto de comparación con aquellos que se han utilizado en el pasado. Sin embargo, en estas nuevas circunstancias, no es seguro que nuestros conocimientos y nuestras prácticas actuales nos garanticen una mejor regulación y una mejor eficacia en este dominio que las que se tuvieron a principios del siglo XX”.
Pero el profesor Brousseau llega a una serie de conclusiones en su estudio que me parecen muy interesantes: ...”Para educar a los poco más de dos mil millones de no adultos debe haber en el mundo alrededor de cincuenta millones de personas que se ocupan profesionalmente de su enseñanza y de su educación junto con unos cuatro mil millones de padres de familia... El número de creadores y de difusores de las ciencias y de las técnicas es probablemente muy inferior a un millón de personas. Si el objetivo de la didáctica es importante, su fuente no lo es menos.
Sin embargo el estudio científico de los fenómenos de la difusión de los saberes científicos, por su parte, no cuenta más que con un número muy restringido de investigadores dispersos en instituciones diferentes, a veces concurrentes, esparcidas en caminos de investigación divergentes. La debilidad de los medios de elaboración y de difusión de los conocimientos didácticos es manifiesta. No obstante, a pesar de ciertos vientos actuales que a veces soplan en la dirección contraria, la didáctica de las matemáticas no arrancó tan mal y progresa. Estoy convencido que entrará progresivamente en las prácticas científicas y sociales, y que va a contribuir a mejorar la educación de todos los niños”.
En conclusión, algo habrá que hacer para cambiar en nuestra manera de “impartir” las Matemáticas. No se puede dejar en manos de la buena voluntad del profesorado o de un proyecto educativo. Afortunadamente hay proyectos interesantísimos que nos acercan a esto que propone Brousseau. Por ejemplo, el trabajo por proyectos nos facilita este cambio ya que hace que el alumnado tenga un aprendizaje más significativo, partiendo de su entorno más cercano, cree su propio producto partiendo de sus intereses, en grupos de trabajo, de manera cooperativa, con roles definidos, investigando, fomentando el pensamiento, buscando información, seleccionándola y teniendo claro qué es lo que se quiere hacer, para luego comunicarlo. Desterrando el estudio de las Matemáticas como algo indvidual y memorístico y pasando a ser el verdadero protagonista de su aprendizaje matemático. Ya lo decía Galileo Galilei: “La naturaleza está escrita en lenguaje matemático”. Dicho queda.
Pretendemos que el alumnado no se aprenda los conceptos de memoria sino que lo vivencia y para ello utilizaremos unos materiales que ponen al alumno en el centro de su propio proceso de enseñanza-aprendizaje y le permite desarrollar la autonomía y el pensamiento crítico: un proceso emocional y emocionante pensado para comprometer al alumno a través de estímulos positivos. Para ello el profesorado está inmerso en un plan formativo exclusivamente de Matemáticas donde ya lleva varias sesiones formativas poniéndose al día en esta nueva metodología. En próximas semanas convocaremos un taller para las familias, para acercarlas a esta metodología.
Para conseguirlo, InnovaMat propone unas matemáticas contextualizadas, un currículum flexible, actividades variadas que parten de material manipulativo y applets, técnicas y estrategias que facilitan la evaluación y la gestión del aula del siglo XXI, la personalización del aprendizaje, el aprendizaje cooperativo o la gamificación. Poco a poco irán viendo los cambios metodológicos en el área. Les pedimos paciencia.