En este artículo encontramos recursos y estrategias didácticas para mejorar las carencias o fallos que los docentes de un centro suelen observar en algunos alumnos y alumnas, sin que los estudiantes deban estar necesariamente "etiquetados" como alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo.
Son recursos y estrategias que pueden ponerse en práctica en cualquier momento y que consiguen grandes resultados si se aplican en momentos especiales como el final de la jornada escolar, la conclusión de una unidad didáctica o el tiempo posterior a un examen.
Este artículo está dirigido a los maestros/as que atienden a alumnos/as escolarizados en las etapas de educación infantil y primaria (de 3 a 12 años). No obstante, pueden ser útiles para otros niveles educativos.
Presentamos estos recursos y estrategias en una tabla en cuya primera columna, se presenta la habilidad a reforzar, desarrollar o trabajar con el alumno/a y el objetivo que pretendemos conseguir.
En la segunda columna, presentamos recursos y estrategias generales para favorecer su desarrollo o mejorar la habilidad, y por tanto conseguir el objetivo planteado, el cuál favorecerá el proceso de aprendizaje y enseñanza de estos alumnos.
Cómo sacar todo el partido a estas actividades
- Este tipo de actividades, ejercicios y/o tareas se pueden plantear de forma individual o colectiva en el aula y suelen durar muy poco tiempo, por lo que no es necesaria una planificación rigurosa para llevarlas a cabo. Son recursos y estrategias que pueden ponerse en práctica en cualquier momento y que favorecen al alumnado, si éstas se desarrollan en momentos puntuales como antes de acabar la jornada escolar (salida del colegio), después de un examen, al finalizar una unidad didáctica, etc.
- La experiencia nos dice que cuando realizamos este tipo de actividades, ejercicios o tareas en esosmomentos "especiales" en los que el alumno/a ya está cansado, o ha terminado las actividades propuestas por el maestro/a, mejora el grado de ejecución por parte del alumno/a y por tanto induce a una mejora notable en su aprendizaje.
- Los objetivos y habilidades que nos planteamos en la primera columna no son evaluables, ni tampoco son contenidos curriculares, pero la experiencia como docentes nos dice que si un alumno/a presenta dificultades o carece de alguna o varias de estas habilidades su proceso de aprendizaje puede verse afectado. Así mismo, sabemos que un alumno/a que no tiene este tipo de dificultades, tampoco las tiene en su proceso educativo.
- Es por ello, la importancia de trabajar las mismas, tanto para garantizar el aprendizaje del alumno/a como para mejorar el proceso de enseñanza del docente. Por tanto, es conveniente plantearse eltrabajo puntual pero continuo de estas habilidades, desde los primeros años de escolarización hasta el final de la Educación Primaria.
- Para la elaboración de la tabla quehemos consultado, a Pedrero Lorente, A. y a Gallardo Ruiz, J.R y Gallego Ortega, J.L., de los que hemos obtenido ideas y recursos para trabajar las "carencias" que presentan estos alumnos/as.
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